MECANISMO DE LA PICADURA
Las medusas pertenecen al phylum Cnidaria (del griego Knide que significa ortiga), el cual se caracteriza principalmente por la presencia de células (como cápsulas) urticantes llamadas nematocistos. Al interior de cada uno de ellas se encuentra un pequeño filamento punzante o inyector de una toxina.
Las medusas utilizan estas células para atrapar a sus presa o para defenderse, cada especie presenta un tipo de toxicidad diferente que puede afectar en menor o mayor grado al ser humano. Estas cápsulas se ubican principalmente en los tentáculos y en los brazos orales, pero también pueden distribuirse en casi todo el cuerpo del animal.
A: Medusa-se señalan sus tentáculos.
B: Tentáculos-se señala una agrupación de células urticantes (nematocistos).
C: Agrupación de nematocistos.
D: Se señala la forma de capsula de las células urticantes.
Cuando los tentáculos entran en contacto con cualquier superficie (presa, piel etc.), el simple roce actúa como estímulo disparador del filamento. Éste se desenrolla, sale de la cápsula como si fuera un arpón e inyecta la sustancia tóxica en la presa, todo en cuestión de décimas de segundo.
En el caso de los humanos, la picadura se produce en el momento en que la piel hace contacto accidental con los tentáculos y las células urticantes (nematocistos). Las picaduras por medusas pueden ser desde leves (dermatitis) y moderadas hasta severas (muerte en pocos minutos), todo depende de la cantidad de toxina en contacto con la piel y la especie de la medusa, así como también de factores como la salud y edad del paciente, peso, la superficie que fue expuesta a la picadura y el grosor de la piel.
MEDUSAS PELIGROSAS Y TRATAMIENTO
En aguas del Caribe colombiano, las especies de escifomedusas con mayor grado de toxicidad, pertenecen al orden Semaeostomeae (medusas con tentáculos largos en su borde umbrelar): Chrysaora lactea y Aurelia sp. Las medusas del orden Rhizostomeae: Stomolophus meleagris, Cassiopea sp. y Lychnorhiza sp. tienen una baja peligrosidad debido a la ausencia de tentáculos, pero al contacto con sus brazos orales puede ocasionar irritación leve en la piel.
Las otras especies peligrosas conocidas como cubomedusas (aguamalas) Alatina alata y Chiropsalmus quadrumanus hacen parte de las familias más peligrosas a nivel mundial, aunque en Colombia hasta ahora no se conocen casos fatales.
El tratamiento debe ser dirigido a 3 objetivos principales:
a) Neutralizar el veneno.
b) Aliviar el dolor.
c) Controlar los efectos.
- Retirar los restos de tentáculos de la medusa preferiblemente con una pinza para evitar ser picado de nuevo.
- Aunque el picor es un síntoma frecuente no debe rascarse la zona afectada, ni frotarse contra nada (tolla o arena).
- Neutralizar el veneno con ácido acético o vinagre al 10%. El vinagre inhibe la descarga de nematocistos, reduce el dolor y causa mínima reacción en la piel.
- Aplicar sobre la zona una bolsa de hule con gelatina fría o hielo para disminuir el dolor.
- Para limpiar la zona de piel expuesta a la picadura se puede usar el agua de mar o suero fisiológico, pues no produce la descarga de los nematocistos.
- Evitar el alcohol y orina sobre la herida.
- Estudios clínicos demuestran que el alcohol en cualquier presentación estimula la descarga de más nematocistos, por lo tanto llevando a una toxicidad mayor de la picadura.
- Evitar el contacto con agua dulce porque causa mayor descarga de nematocistos.
- No aplicar calor ya que puede aumentar la absorción del veneno.
- Uso tópico de solución de formalina 10% amortiguada con exceso de carbonato de calcio, bicarbonato de sodio y ácido bórico en polvo. Todo esto para inhibir otra descarga de nematocistos.
- Siempre que sea posible es útil identificar la especie de medusa, tanto para iniciar un tratamiento específico, como para valorar la posible evolución de las lesiones y su gravedad.
Hemos construido una guía de primeros auxilios para las medusas que se encuentran en el Caribe colombiano, en conjunto con el Biólogo Marino Andrés Rojas y el Médico hiperbárico y subacuático Leonardo Gianpaoli. La pueden descargar GRATIS en PDF desde la página de leo en https://www.leonardobucea.com/post/medusas
Tomado de:
Field-Cortazares, J., Calderon-Campos, R. 2009. Picadura por aguamala. Bol Clin Hosp Infant Edo Son. 26(1):38-42 (Ver artículo)
Mianzan H & P Corneliu s. 1999. Cubomedusae and Scyphomedusae. En: Boltovskoy D (ed). South Atlantic zooplankton 1: 513-559. Backhuys, Leiden
